De Canaletto a Fontana
La imagen de Venecia siempre ha estado asociada a su mito. El deseo de recrear una ciudad idealizada es algo que durante mucho tiempo ha acompañado y alimentado su representación. Las vistas o vedute de Venecia fueron muy reconocidas y admiradas por los viajeros ingleses que en el siglo XVIII realizaban el Grand Tour por tierras italianas.
Para muchos, Venecia, la ciudad de la eterna inspiración, se debate entre la realidad y la ficción gracias a los cuadros de William Turner, Claude Monet, John Singer Sargent o Lucio Fontana; las imágenes fotográficas de Carlo Naya o Carlo Ponti; las historias de Dickens, Ruskin, Thomas Mann o Donna Leon. También el cine ha contribuido al imaginario de la ciudad con películas como Casanova (1976), de Federico Fellini. Pero antes que los foráneos fueron los propios venecianos los que construyeron el imaginario de su propia ciudad con los relatos pictóricos de Gentile Bellini, Giorgione, Michele Marieschi, Francesco Guardi y, sobre todo, Canaletto (Giovanni Antonio Canal), el pintor de la verdad y el artificio.
Con este punto de partida, en esta historia, vamos a realizar un pequeño paseo que combina obras pictóricas del Museo Thyssen, imágenes fotográficas de dos pioneros de la fotografía del siglo XIX y mapas de diferentes épocas que invitan a reflexionar sobre el pasado y el presente cultural de esta ciudad única.